
Un sabor mexicano único: Helado de Rompope
El helado de rompope es un verdadero clásico mexicano, inspirado en la tradicional bebida preparada por monjas en conventos coloniales. Combina leche, yema de huevo, azúcar y un toque de licor para lograr un sabor inconfundible.
Este helado es muy popular en las fiestas decembrinas, aunque se consume todo el año en neverías y restaurantes. Su cremosidad y dulzura lo hacen un postre elegante y a la vez muy cercano a las raíces mexicanas.
En México, el rompope se produce artesanalmente en varios estados, como Puebla y Michoacán, lo que refuerza su autenticidad. Al transformarse en helado, conserva su espíritu festivo y reconfortante.
Cada cucharada evoca la tradición conventual y la historia cultural del país. Es un helado que combina nostalgia, celebración y un sabor que trasciende generaciones.